20 diciembre 2015

Los lustras batallan contra el desempleo

La Población Económicamente Activa en Bolivia es de 4,5 millones de personas, de un total de 10,3 millones de habitantes, mientras la tasa de desempleo es de 3,2% según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) a 2013. Sin embargo, el Centro de Estudios Laborales (Cedla) señala que ésta alcanza a 14,5 por ciento, lo que significa que en ambos casos se trata de más del doble de la tasa de desocupación general.

La población joven, comprendida entre los 15 y 29 años de edad, llega a los 2.865.517, un total de 28,5 por ciento del total nacional del país. En este sector están los lustrabotas. El Código Niño, Niña y Adolescente señala que la edad mínima para trabajar es a partir de los 14 años en Bolivia.

Según el dirigente del sector, hay muchos niños que se inician en este oficio, pero la mayoría lo deja para terminar sus estudios. Los que se quedan lo hacen por falta de apoyo económico familiar o una inminente situación de calle.

En Bolivia, de acuerdo a datos del Fondo de Población para las Naciones Unidas (UNFPA, 2011), el 47,2% de los jóvenes (51,5% de mujeres) está en situación de pobreza, mientras el 35,7% de los varones (37,7% en caso de las mujeres) está en situación de indigencia.

La cifra aumenta en el caso de jóvenes indígenas (58,2% de situación de pobreza) y más aún en el área rural, donde el 67,8% de los jóvenes son pobres. En el área urbana la cifra baja a 41,6%. En el caso de la población joven no indígena la cifra llega a 42,9%.

En Cochabamba existen aproximadamente 200 mil niños y niñas trabajadores que se encuentran en estado de vulnerabilidad de derechos y expuestos a varios tipos de violencia en la calle, según un reporte de la Defensoría del Pueblo del departamento.

La directora del Centro de Planificación y Gestión de (Ceplag) de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), Carmen Ledo, dijo que hay una fuerte relación entre el desempleo y la migración interna.

Esta informsación refleja la procedencia de los lustrabotas, según Carmen Ledo, ya que el perfil de estos trabajadores es de un migrante joven, generalmente del área rural de Cochabamba, aunque también del interior del país y con ascendencia indígena.

Datos del Observatorio Ciudadano Cochabamba nos Une señalan que cuatro de cada 10 migrantes que llegan a Cochabamba provienen de las áreas rurales del departamento y la mayoría de estos son personas en edad de trabajar. Muchos son jóvenes.

Según el psicólogo Humberto Martínez del centro Uyarina (Punto de Encuentro), el origen de la actual población que vive en situación de empleo precario, como son los lustrabotas,se remonta a la década de los 80, con el inicio de la época neoliberal y las políticas de ajuste estructural, que dejaron a una generación de trabajadores sin fuentes de ingreso, luego, de la relocalización. Estas poblaciones migraron a las ciudades donde se generaron cinturones de pobreza, separación de familias e informalidad. La mayoría de los lustras viene de ahí, de las familias viajantes, de las familias “rotas”.

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