El aumento salarial impacta en diez beneficios laborales

El incremento del 10,8% al salario mínimo nacional (SMN) y el 7% al haber básico encendió la alarma del empresariado nacional, pues de acuerdo con sus cálculos -coincidente con la lista de la Jefatura departamental de Trabajo-, estos porcentajes van a encarecer sus costos de al menos diez beneficios laborales que deben pagar.


Ronald Nostas, presidente de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia, remarcó que es necesario entender que los incrementos salariales no son cuestiones aisladas, pues se suman otros costos laborales que los empresarios deben asumir, como el aporte a la AFP, el pago a la Caja de Salud y a la construcción de las viviendas sociales, el aguinaldo, la prima anual sobre las utilidades, el bono a la producción en la industria, el salario dominical, el bono de antigüedad, el pago de quinquenio y el subsidio.


Freddy Suárez, presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), indicó que en el sector hay preocupación, debido a que tendrán graves problemas para hacer frente al nuevo escenario salarial.
“El clima nos golpea, el contrabando afecta a la producción y la Función Económica y Social nos presiona. Si el Gobierno no se va a hacer cargo de posibles desempleos, tampoco lo hará la CAO”, señaló.


Lili Fiorilo, presidenta de la Asociación Nacional de Comercializadores Privados de Hidrocarburos, indicó que el costo laboral en el pago de los salarios supera el 60% de sus gastos de operación, algo que hace insostenible la actividad.

Derechos de los trabajadores
Anibal Melgar, asesor legal de la Jefatura Departamental de Santa Cruz, explicó que es cierto que hay un conjunto de beneficios sociales para los trabajadores que se van a modificar con el incremento salarial.


Melgar precisó que de los diez puntos expuestos por los privados, tres son los que tienen mayor relevancia. Se trata del bono de antigüedad, del subsidio y del aguinaldo.
La autoridad indicó que el pago de la AFP corre por cuenta del trabajador con un 12,71%, quedando un 5% para el empleador; en cuanto al aporte patronal a la Caja de Salud, un 10% y al Provivienda, otro 2%, Melgar señaló que se trata de derechos ganados por los trabajadores.


Sobre el pago de la prima, Melgar puntualizó que no es obligatoria siempre que la empresa demuestre que no obtuvo utilidades. “Cada sector tiene su postura, pero lo que está claro es que una vez reglamentada la norma, se la debe cumplir”, sostuvo Melgar.