El 86% de las empresas grandes, medianas y pequeñas del eje central del país va a mantener a sus empleados o incrementará su planilla, frente a un 14% que alista despidos, según los resultados de una encuesta realizada por Dinero a 100 gerentes generales.
De acuerdo al sondeo, que se llevó a cabo del 16 al 26 de enero, las nuevas contrataciones (35%) se darán en las empresas comerciales y de servicios.
Ronald Nostas, vicepresidente de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB), indicó que este año los inversionistas cuidarán los empleos porque confían en la visión del ministro de Economía, Luis Arce, que ha fundamentado con bases sólidas que se va a mantener el crecimiento en Bolivia.
De acuerdo a Nostas, el empresariado seguirá aportando para que la crisis tenga el menor impacto posible en el país y que no afecte en los empleos.
Sobre el 14% de las sociedades que anticipa despidos, el dirigente cree que está midiendo un poco el escenario de los próximos meses y tal vez desista de su plan inicial. “Creo que deberían volver a consultarlos en abril”, sugirió Nostas.
Para la directora ejecutiva de BPO Center, Denise Hurtado, las compañías invierten en recursos humanos y por ello optan por la retención inmediata al talento, que es cada vez más escaso, o contratan a profesionales que deben ser más especializados en los diferentes sectores.
Según Wilboor Brun, director del Centro Pópuli, cerca del 70% de la fuerza laboral trabaja en el sector informal, por lo tanto los despidos que se hagan por motivos de falta de capacidad para afrontar la regulación laboral llaman la atención para una revisión de la normativa laboral, que, de acuerdo a indicadores internacionales, opera en desmedro de los mismos trabajadores.
Para el economista Teófilo Caballero es positivo que un 86% de las empresas en Bolivia piense aumentar personal y mantenerlo. Sin embargo, advierte que el optimismo sin duda se va a desdibujar en 2016, porque se sentirán los efectos por la merma de los ingresos de la renta gasífera.
El 62% subirá el salario
En cuanto a las proyecciones para este año, el 62% de las empresas acatará la disposición del Gobierno en materia salarial, el 23% aún no tiene definido el tema y un 15% ha decidido no subir los sueldos.
El sector privado es consciente de que el aumento salarial decretado por el Gobierno es muy difícil de negociar con la clase obrera, por la experiencia de los últimos años. Ronald Nostas, vicepresidente de la CEPB, dijo que las firmas cumplirán lo establecido por el Gobierno porque en varias oportunidades intentaron explicar sus razones sobre la política de incremento, pero no fueron escuchados.
“Esperamos que nos convoquen para dialogar, pero caso contrario deberemos hacer los esfuerzos necesarios para cumplir”, sostuvo el dirigente.
En las últimas semanas la Confederación de Fabriles anticipó que la propuesta de reajuste salarial estará en el orden del 15%; sin embargo, el presidente de la Cámara Nacional de Industrias (CNI), Mario Yaffar, dijo que el incremento salarial para esta gestión debería ser igual y no superior a la inflación acumulada de la presente gestión.
Yaffar señaló que con el pago del segundo aguinaldo la población ya recupera la pérdida capacidad de compra. “El manejo de las cifras de cuán grande debería ser (el alza), creemos que debería ser igual al nivel de los precios”, indicó.
La Cámara Nacional de Comercio coincide con los industriales. El presidente Fernando Cáceres pidió al Gobierno trabajar una política salarial de mediano y largo plazo de manera conjunta -trabajadores, Gobierno y empresarios-, para evitar cada año los conflictos por el tema.
El 13 de enero, el ministro de Economía, Luis Arce, explicó que su despacho comenzó a evaluar todas las variables económicas registradas el año pasado, como la inflación y el crecimiento empresarial, para definir una propuesta técnica sobre el incremento salarial de 2015.
Según la consulta realizada por Dinero, las empresas nacionales continúan brindando un incremento salarial mayor que las multinacionales. Por sector económico, el mayor aumento se prevé en el sector comercial, seguido de servicios e industrial. Incluso algunos gerentes generales indicaron que presupuestaron entre un 12 y 20%.
Acerca del porcentaje de incremento salarial, el 54% dijo que acatará el valor que determine el Gobierno, como en 2014.
Para Caballero, el reajuste salarial se estima entre un 7 y 8% para 2015, y las empresas lo deberán cumplir, ya que, en su criterio, existe un excesivo control sobre las compañías formales.
La situación en 2014
Los incrementos salariales otorgados en 2014 tuvieron una mejora con respecto a los concedidos en el 2013, impulsada por la bonanza económica y el repunte de los precios de las materias primas.
Comparando encuestas realizadas por Dinero en diciembre del 2013, el 65% de las empresas proyectó realizar reajustes salariales en 2014, mientras que el 3% reportó que no los otorgará y el 32% restante aún no ha definido los incrementos.
Los resultados a diciembre del 2014 mostraron que hasta el 82% de las empresas bolivianas de la muestra otorgó, efectivamente, incrementos salariales a sus colaboradores y que el 18% restante no otorgó un aumento salarial el año pasado
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