Tras la reunión sostenida por la Unión de Niños, Niñas y Adolescentes Trabajadores de Bolivia (Unatsbo) y la comisión de la Cámara de Senadores se llegaron a firmar tres acuerdos, en uno de ellos se indica que el trabajo infantil debe ser voluntario y sin ningún tipo de presiones externas a su decisión.
La noche del pasado miércoles, la presidenta de la Cámara de Senadores de la Asamblea Legislativa Plurinacional, Gabriela Montaño Viaña, y los representantes de la Unatsbo sostuvieron una reunión donde trataron el Código Niño, Niña y Adolescente.
"Nosotros queríamos incorporar tres aspectos importantes, uno es la edad mínima, el otro es los trabajos peligros y el otro son los derechos elaborados por nosotros mismos, derechos de protección (
) Solo han tomado en cuenta dos, la edad mínima y los trabajos peligros", dijo en visita a EL DIARIO Rubén Gutiérrez Cruz, secretario general de la Unatsbo.
La reunión ingresó en un cuarto intermedio, hasta nuevo aviso, sin embargo, Marianel Ayala Menacho, secretaria de difusión y comunicación de la Unatsbo, sostuvo que para los trabajadores menores de edad es importante que tomen a consideración su punto de vista.
"Esto son sólo acuerdos, ella (Montaño) decía que va terminar la reunión con los senadores y diputados, lo van a revisar, luego nos van a llamar", explicó Gutiérrez, quien vino desde el departamento de Potosí.
El acta de acuerdos Niña, Niño y Adolescente señala en su primer punto que los límites del trabajo voluntario tendrán que ser como referente a los principios de la Constitución Política del Estado (CPE).
Indicó que se prohíbe rotundamente la explotación laboral, los ambientes y las situaciones insalubres que afecten al niño, niña y adolescente. Además en ningún caso deberá limitar el acceso a su educación y respetará en toda circunstancia su dignidad como persona.
TRABAJOS PROHIBIDOS
Como segundo punto, el documento indica que se revisará a nivel técnico la lista de los trabajos peligros establecidos en el Artículo 131, siendo que la lista de trabajos públicos o prohibidos será actualizada y reajustada cada 5 años en coordinación con las organizaciones de niñas, niños y adolescentes trabajadores, de acuerdo a nuevas situaciones.
De la misma forma, las entidades territoriales autónomas deberán desarrollar mecanismos para apoyar y vigilar el proceso para erradicar la explotación del trabajo de niñas, niños y adolescentes.
"En el ‘d’ es la pesca, decían que es peligroso para los niños porque se pueden caer al río, en el ‘e’ es la artillería porque hay dos tipos", señaló Ayala, quien llegó desde Santa Cruz.
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