25 octubre 2012

Nace comité contra “fraude laboral”


“Me despidieron y no me pagaron mi liquidación”, contó Juan, un albañil que después de trabajar seis meses en una empresa sólo con un contrato verbal fue despedido con la promesa de pagarle todos sus beneficios sociales. Sin embargo han pasado más de tres meses y hasta ahora no ha visto ni un centavo de su indemnización.

Juan comentó que no tiene ningún documento que demuestre que haya trabajado, sólo es su palabra contra la de su compadre, que hasta ahora le pide paciencia.

Así como él, hay centenares de trabajadores que por ganar dinero confían y trabajan sin exigir un contrato.

Sin embargo, desde hace un tiempo se creó el Comité Impulsor contra el Fraude Laboral en Cochabamba, un grupo compuesto por trabajadores, jóvenes y mayores que viven las condiciones del denominado fraude laboral (con subcontratos, consultorías, a destajo, entre otros) y están dispuestos a informar y organizar a los diferentes sectores que trabajan sin derechos, para conformar una nueva organización social de acción colectiva, autónoma, unitaria y de lucha que lleve a todos a la recuperación de los derechos laborales.

El objetivo de esta organización es difundir la información tanto en el sector público y privado para visualizar la realidad y la existencia masiva de contratos fraudulentos para trabajadores que se encuentran por tal razón en condiciones de precariedad, sin gozar de sus derechos y beneficios sociales que por ley les corresponde.

Para consolidar la organización que defienda los derechos laborales, el Comité Impulsor contra el Fraude Laboral creó una revista que es distribuida en varios sectores con la finalidad de sumar gente que denuncie y luche porque la vulneración de sus derechos se acabe.

En la revista se difunde varios artículos “claves” de la Ley General del Trabajo, con la finalidad que los trabajadores conozcan sus derechos.

Según la nueva Constitución Política del Estado, la Ley General del Trabajo, decretos y resoluciones ministeriales del país, la evasión de los beneficios sociales y los contratos que no cumplan con los derechos de los trabajadores son ilegales y sancionados.

FABRILES

Por su lado, los dirigentes fabriles imparten talleres a representantes de los 65 sindicatos afiliados en Cochabamba para que éstos a la vez socialicen los derechos que tienen los trabajadores.

El secretario ejecutivo de la Federación de Trabajadores Fabriles de Cochabamba, Mario Céspedes, informó que en la actualidad los secretarios generales y delegados de los diferentes sindicatos vienen analizando la nueva Ley de Pensiones, norma que luego será socializada entre todos los trabajadores.

“Todos los martes nos reunimos para analizar la nueva norma que debemos conocerla de principio a fin para defender nuestros derechos y saber cómo proceder a la hora de la jubilación”, dijo Céspedes al indicar que en anteriores oportunidades se abordaron otros temas inherentes a los derechos laborales.

Agregó que de manera constante, los dirigentes intentan capacitarse para apoyar a sus compañeros cuando éstos encaren situación de conflicto con sus empleadores.

ASESORAMIENTO

Asimismo, Céspedes indicó que la Federación de Trabajadores Fabriles brinda asesoramiento a cualquier trabajador que acuda a la organización.

“Nosotros estamos prestos a ayudar a todo aquel que necesite, porque como dirigentes debemos velar por el respeto a los derechos labores”, manifestó el máximo representante de los fabriles.

Asimismo subrayó que los trabajadores deben hablar sobre su situación laboral en sus sindicatos, sin embargo muchos no lo hacen por temor a los empleadores, quienes por lo general reaccionan de manera contraria.

“El miedo debe acabar, ahora si no pueden hacerlo en sus sindicatos que vengan a la Federación para que aquí los asesoremos y asumamos juntos acciones que lleven a respetar sus derechos”, apuntó.

Comentó que cada vez son más las personas, tanto hombres y mujeres, que van hasta la Federación a pedir ayuda, sin embargo otros no lo hacen porque no están sindicalizados.

Según el estudio realizado por el Instituto de Investigaciones en Ciencias Sociales de la Universidad Mayor de San Simón, sólo el 34 por ciento de los trabajadores en Cochabamba es miembro de un sindicato, en tanto que la mayoría (54 por ciento ) no tiene ninguna afiliación, porque en algunas empresas no se permite la conformación de una organización que defienda a trabajadores.

Ante esta situación, Céspedes llamó a los trabajadores a organizarse en sindicatos o asociaciones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario