Las fuentes de trabajo que existen en el denominado eje metropolitano de la ciudad de Cochabamba (Cercado, Quillacollo, Colcapirhua, Sipe Sipe, Sacaba y Tiquipaya) no son de calidad, vulneran derechos laborales y las mujeres continúan siendo un sector discriminado en cuanto a remuneración económica y condiciones de empleo se refiere.
Esta realidad nada alentadora es parte de los resultados de una investigación de poco más de un año que promovió el Instituto de Investigaciones en Ciencias Sociales (INCISO) de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS) y la Fundación Abril.
Denominado “El nuevo mundo del trabajo” investigación de la realidad laboral en el área metropolitana de Cochabamba, el documento fijó como meta responder dos preguntas estratégicas: ¿qué características sociales, familiares, culturales y de condiciones de vida tienen los trabajadores en el área metropolitana de Cochabamba? y ¿cuáles son las condiciones en las que trabajan?.
Ambas interrogantes que guiaron la investigación fueron incluidas en las dimensiones de fragilidad e inestabilidad en el empleo, las condiciones laborales internas, la situación de indefensión y vulnerabilidad.
El estudio logró identificar también una tipología de trabajadores en base al nivel de precariedad, explicó la investigadora Carla Ascarrumz.
El estudio puso al descubierto, por ejemplo, que el 30 por ciento de los trabajadores encuestados, de aproximadamente 535 personas, tiene un ingreso promedio de Bs 1.600. 6
El acceso a vacaciones anuales tampoco es una regla y la mujer continúa teniendo acceso a niveles salariales inferiores al los que percibe un varón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario