El director del Instituto de Asistencia Social Económica y Tecnológica (Inaset), Enrique Velazco, advirtió que la tasa de precariedad del empleo en el país llega probablemente al 80% de los trabajadores.
Explicó que esta situación debe ser revertida por la economía plural que plantea la nueva Constitución Política del Estado (CPE), pues se tienen que “superar las falencias y fracasos del pasado que han llevado al país a ser uno de los más pobres de América Latina”.
Velazco afirmó que se precisa adoptar un nuevo modelo económico cuyo propósito sea privilegiar la generación de empleo y “superar el extractivismo rentista”, a través de “una nueva forma de economía que privilegie la creación de valor, no a partir de la Pachamama, sino del esfuerzo de la gente”.
La economía plural está incluida en el artículo 306 de la CPE y señala que el modelo económico está compuesto por varias formas de organización económica, como la comunitaria, la estatal, la privada y la cooperativa, cuyos principios son de complementariedad, reciprocidad, solidaridad, redistribución, igualdad y seguridad jurídica.
Lo que no está claro, según Velazco, es qué rol tienen ahora estos tipos de organizaciones económicas “para superar (') los rasgos del neoliberalismo” y “cómo va a ser el desarrollo productivo boliviano con la participación de este tipo de actores”.
Nuevas disposiciones
El nuevo marco constitucional señala de manera declarativa cómo está constituido este nuevo modelo económico, pero no define políticas públicas como los incentivos específicos, las formas de administración y organización o su reconocimiento dentro del nuevo Código de Comercio. Como en el caso de las empresas comunitarias, que aún no han sido vinculadas a este régimen.
El director del Inaset no cree que la economía plural, como está planteada, sea la respuesta a la generación de empleo y sostiene que “uno de los temas urticantes a discutir dentro de lo que debería ser la economía plural es el rol de las empresas estatales”.
Tanto la Constitución como el Plan de Desarrollo Nacional (PND) señalan que la empresa estatal es la encargada de la generación de excedente a través de los sectores estratégicos de la economía para su posterior distribución, y que la tarea de crear empleos y desarrollar la industria corresponde a la empresa no pública que, según Velazco, en este momento es la creadora del 90% de empleos en el país.
“Bolivia debería enfrentar seriamente el tema de generar alrededor de 180 mil a 200 mil puestos de trabajo por año, de los cuales el 94% debería ser urbano”, dijo.
Otro de los desafíos del nuevo modelo económico es la distribución del excedente generado.
La cooperativa minera en Bolivia, por ejemplo, dice el director del Inaset, “es una organización que está precarizando o contribuyendo a precarizar todavía más el tema del empleo; la distribución de la riqueza no se hace en forma equitativa”.
Afirmó que el Estado debe generar reglas e incentivos en función de la economía plural.
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