El incremento salarial, que cada año fija el Gobierno según los niveles de la inflación, debe preservar la ampliación de capacidad productiva y mejorar la condición de vida de los obreros, explicó el fin de semana el vicepresidente Álvaro García Linera.
"Vamos a encontrar un punto de acuerdo, que nos permita que el incremento salarial mejore las condiciones de vida de los obreros, pero a la vez también se preserve la ampliación de la capacidad productiva de nuestro país", indicó en una improvisada rueda de prensa.
Análisis. García Linera recordó que el pliego petitorio de la Central Obrera Boliviana (COB) es analizado en cuatro comisiones en las que participan el Gobierno y los trabajadores, de las que "la más importante es la que tiene que ver con el tema salarial". La autoridad detalló que el debate más complejo es cómo se distribuyen las ganancias, que podría ser en salarios o en inversión.
Sin embargo, a su juicio lo más justo es que se divida un 50% en salarios y un 50% se preserve para la ampliación de la capacidad productiva del país, o inversión en áreas sociales, para que haya más fuentes de empleo, hospitales, escuelas, además, de mejorar el salario.
Aclaraciones. "Está claro que el Gobierno siempre está pensando en mejorar las condiciones de vida de los obreros, pero también preservando inversión, en área sociales, salud y educación, y en inversión productiva, yo creo que ese razonamiento les vamos a hacer entender a nuestros compañeros de la COB", dijo.
En el documento de la COB, los trabajadores demandan un incremento salarial acorde al crecimiento económico del país, indicador que registró en 2013, 6,8%, además, la nacionalización de un yacimiento aurífero, una empresa hidroeléctrica y una empresa petrolera, complementariamente a la reglamentación de la Ley de Empresas entre otros.
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